Cuando ya no esté
no llores por mi…
guarda esas lágrimas
para regar esa rosa que entregué para ti
guarda su perfume
porque en élla... yo estaré ahí
Cuando ya no esté
no reces por mi..
guarda esos rezos
y entrégalos… al poema que te escribí.
Cuando ya no esté
no vistas de negro… viste de rosa
que es el color, de la flor que te dí
y cubre ese poema, que un día te ofrecí
Cuando ya no esté
grita a los vientos
el amor que te ofrecí
para escuchar tu voz
el amor que te ofrecí
para escuchar tu voz
en el silencio de mi anochecer
Cuando ya no esté
bautiza a ese hijo
que nunca en tu vientre vivió
en espera de ese padre que no está
Cuando ya no esté
implora a los cielos
que un día a mi lado estés
para seguir amándonos
de ese día y hasta:
LA ETERNIDAD
SACARIAS